viernes, 26 de febrero de 2016

Lo más interesante del MWC 2016


     Un año más el MWC ha pasado por Barcelona. Un año más la feria más importante del movil ha llegado a nuestro país y ha presentado sus novedades. Un año más hemos querido dar imagen de modernidad del país y de la ciudad de Barcelona. Un año más una feria que hacen ellos para ellos han pasado por aquí han dejado hoteles y restaurantes llenos durante unos días. Un año más los servicios públicos de transporte hacen huelga. En definitiva, lo mismo de cada año.

     Un año más esta feria cuyos precios parten a partir de 700 y pico Euros y hasta 2000 y pico Euros la entrada con acceso total ha tomado el protagonismo mundial del movil. (Por cierto se hace en Hospitalet no en Barcelona, pero bueno).

     Grandes presentaciones, grandes stands, grandes ausencias... Ausencias como las de Apple que siempre presenta sus productos en privado, ausencias como avances en las baterías, ausencias de nuevas tecnologías en realidad.

     Tiene sentido una feria del movil anual cuando realmente no hay grandes saltos de calidad de año a año?, reconozcamos que un cambio de procesador, 1 GB más de memoria Ram y unos megapíxeles en las cámaras no dan para mantener este circo. Si por 1 GB y un procesador nuevo hay que hacer una feria tendríamos que hacer cada mes y medio una feria de ordenadores o portátiles.

     La verdad es que de todo lo visto lo único interesante, y veremos en que queda, es el LG G5 y el nuevo cacharrito de Xiaomi, el Mi5.

     El LG G5 es un smartphone de gama alta al que mediante una pestañita se extrae la parte inferior del teléfono y se le van añadiendo accesorios según tus necesidades, que si una cámara mejor con un modulo de batería y botones físicos, que si un sistema Hifi de mejora de sonido...

     El Xiaomi Mi5 es, como nos tiene acostumbrados Xiaomi, un  gama alta a precio de gama media. Por aproximadamente 300 € tienes un procesador Snapdragon 820, 3 GB de Ram y 32 GB de almacenamiento, todo ello con una cámara firmada por Sony. Sorprendente hardware y sorprendente precio.

     Lo demás, más de lo mismo. El Galaxy S7 es igual que el S6 pero con vitaminado con ese Giga de Ram y procesador nuevo, el nuevo Sony será un X en vez de un Z, Huawei ha sacado un clon de la Surface...

     Al fin y al cabo después de una semana de mucho ruido hemos visto un smartphone semimodular, un fabricante chino que da un golpe encima de la mesa y una marca española (Bq) que lanza una tablet con Ubuntu. El resto, lo mismo de siempre más o menos hormonado.


     Donde está esa batería que dura una semana? Ese es el paso que realmente queremos ver.

     Donde está ese compromiso, o por lo menos debate, para no utilizar minerales de sangre (Coltán)? Ah no, que mientras tengamos moviles, mp3 y ropa barata no nos vamos a meter con como se trabaja la materia prima, total no son de aquí. Después todos somos muy sociales...

   

           

viernes, 9 de octubre de 2015

¿Las televisiones nos engañan como Volkswagen?


Ahora las televisiones nos engañan como Volkswagen? Conspiparanoia o realidad?

     Pocos días después de saltar a la palestra el escándalo de Volkswagen varios blogs, periódicos más o menos serios e incluso la OCU han estado hablando sobre la posibilidad de engaños de ciertas marcas de televisión a los tests de energía para conseguir una clasificación energética superior.

     El caso es que ese aparato se testea antes de salir al mercado en un entorno en concreto y debe pasar una serie de certificaciones que posteriormente le otorga una clasificación energética X.

     Se está acusando a algunos fabricantes de TV de falsear los consumos a la hora de realizar ese testeo disminuyendo el brillo de la pantalla y obteniendo así una clasificación energética superior a la real. Es cierto eso?.

     Pues no y sí. Las televisiones más o menos modernas tienen un modo ECO. Este modo lo que hace es disminuir o aumentar el brillo de la pantalla en base a la luz ambiental o en base a lo que están mostrando en pantalla.

     Algunas marcas llevan de serie conectado el modo ECO con lo cual las mediciones se realizan en base a ese modo obteniendo así una eficiencia energética máxima. Y así lo suelen hacer constar en sus manuales, que en el modo ECO consume X y en cualquier otra configuración Y.

     En cuanto las colocamos en casa tocamos la configuración a nuestro gusto convirtiendo nuestra flamante tele de bajo consumo en una tele menos eficiente.

     Las condiciones de laboratorio (entorno controlado y manejado por expertos) no es lo mismo a un entorno real manejado por usuarios. Las certificaciones tendrían que realizarse en las mismas condiciones que se van a utilizar los aparatos. Así serían más reales.

     Por tanto sí. La tele gasta más de lo que dice la etiqueta en un uso del diario. Pero no. No nos han engañado porque somos nosotros quien la configuramos para que se vea mejor y claro gasta más.

     Al igual que la duración de la batería del smartphone cuando ponemos el brillo a tope o tenemos activado el GPS, el Wifi y los datos 4G en medio de una zona rural en la que apenas llega cobertura!!!

     Las certificaciones tanto de gases, como de eficiencia energética como de pruebas de esfuerzo de materiales, como de rendimiento tienen que ser en condiciones reales. No es lo mismo, ni de lejos, ese brazo robótico que tan delicadamente abre y cierra las puertas de cocina en el IKEA que un niño o nosotros mismos cuando estamos con prisas y damos un portazo.

     Incluso algunos smartphones han tenido sus más y sus menos cuando les hacen las pruebas de rendimiento, los populares Benchmarks, en los que analizan la potencia bruta del dispositivo dan casi todos unos valores estratosféricos aunque después la experiencia de usuario deja bastante que desear.

     Condiciones reales, pruebas más estrictas y al que haga trampas pues que pague y no solo con dinero. Que eso es siempre negociable.


Nos vemos en las redes.